
A pesar de las constantes campañas de concientización, conducir bajo los efectos del alcohol sigue siendo una de las principales causas de accidentes viales en México. De acuerdo con datos de la Secretaría de Salud, cada año miles de personas resultan lesionadas y cientos pierden la vida por esta imprudencia que pudo evitarse.
El alcohol disminuye los reflejos, afecta la visión y retrasa la capacidad de reacción, lo que aumenta considerablemente la probabilidad de provocar un accidente. Especialistas en seguridad vial señalan que un conductor alcoholizado puede tardar hasta el doble en frenar ante una emergencia, lo que convierte a su vehículo en un riesgo no solo para él, sino también para pasajeros, peatones y otros automovilistas.
Un problema social
En ciudades y carreteras del país, autoridades de tránsito implementan operativos de alcoholímetro con el objetivo de salvar vidas. Sin embargo, aún es común que automovilistas intenten evadirlos o minimizar el peligro de manejar en estado de ebriedad.
Los costos no solo se miden en sanciones económicas o arrestos administrativos: detrás de cada accidente hay familias afectadas, proyectos de vida interrumpidos y comunidades enteras golpeadas por la tragedia.
La alternativa responsable
Expertos reiteran que si se consume alcohol, lo más seguro es no conducir. Hoy en día existen múltiples alternativas: pedir un taxi, utilizar aplicaciones de transporte o designar a un conductor responsable dentro del grupo de amigos.
Conclusión
El mensaje es claro: si tomas, no manejes. Una decisión responsable puede ser la diferencia entre llegar con bien a casa o protagonizar una tragedia que marque para siempre tu vida y la de los demás.
Más historias
📢 Amplían fecha de inscripción al Concurso Nacional “Transparencia en Corto” 2025 📢
☀️ Temporada de calor: autoridades llaman a extremar precauciones ☀️
VIAJAR DE TEPIC A LOS ÁNGELES ¡YA ES UNA REALIDAD!